Las nuevas formas de funcionamiento de la delincuencia, que se manifiestan con especial gravedad en la criminalidad organizada, exigen también nuevos sistemas para combatirla.
La sociedad, además de continuar sirviéndose para ello de los procedimientos y técnicas, tradicionales y modernos, empleados por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, ha ido paulatinamente implantando otros métodos y mecanismos de indiscutible eficacia.
También aquí se plantea la cuestión procesal sobre la preservación o no de la identidad del agente encubierto durante el juicio oral.
Dando que ya he reproducido los argumentos expuestos en relación con el testigo protegido, me pronuncio igualmente a favor de la exigencia de que en un sistema acusatorio el acusado conozca la identidad de todo testigo, especialmente si es de cargo, aunque se trate de un agente encubierto.